¿Quién venció al amor? – Cuento

¿Quién venció al amor?- Cuento from Ona Daurada on Vimeo.

Todos los sentimientos estaban de acuerdo en algo, el amor estaba supervalorado, la humanidad, aunque en realidad no lo cumplía, sólo hablaba de las ventajas y bondades del amor.

Así que cuando Odio convocó una asamblea para discutir este tema, todos los sentimientos acudieron de todas las partes del mundo para solucionar de una vez por toda esta situación.

Cuando estuvieron todos reunidos, Odio se puso de pie y dijo:

-Los he reunido a todos porque deseo con todo mi corazón acabar con alguien.

Los asistentes no se extrañaron pues era Odio quien hablaba y él siempre quería hacer desaparecer algo o a alguien.

-Quiero voluntarios que acaben con el odioso Amor, -dijo Odio. Y como no es tarea fácil, necesito la ayuda de todos.

Los malos sentimientos, los defectos, las malas virtudes y los deseos más perversos del corazón humano, sonrieron, ya que casi todos querían hacerlo de una u otra forma.

Pero otros como Esperanza, Alegría o Compasión no estuvieron de acuerdo, pues de alguna manera ellos eran hijos de Amor, y abandonaron la perversa reunió.
El primer voluntario fue Mal Carácter.

– Yo iré y les aseguro que en un mes, Amor habrá desaparecido. Con ayuda de Ira provocaré tal discordia que no lo soportará.
Al cabo de un mes se reunieron otra vez para escuchar lo sucedido, pero Mal Carácter tenía malas noticias.

– Lo siento, lo intenté todo pero cada vez que yo sembraba una discordia, Amor la superaba y salía adelante, -les dijo.

Fue entonces cuando, se ofreció Ambición que haciendo alarde de su poder dijo:-En vista de que Mal Carácter ha fracasado, iré yo. Desviaré la atención de Amor hacía el deseo por la riqueza y el poder, y no podrá vencer la tentación. No fallaré.
Ambición, inició el ataque hacia su víctima, quien efectivamente cayó herida, pero después de luchar ferozmente, renunció a todo deseo de poder y triunfó.
Enfurecido Odio por el fracaso de Mal Carácter y Ambición y decidió enviar a Celos, quien burlón y perverso inventaba toda clase de artimañas y situaciones para despistar, llenar de dudas y sospechas infundadas a su adversario Amor. Pero éste no tenía ninguna intención de desaparecer, y con valentía y fortaleza lo venció.
Año tras año, Odio continuó en su lucha y envió a sus más hirientes compañeros: Frialdad, Egoísmo, Indiferencia, Pobreza y a muchos otros, pero todos fracasaron, porque cuando Amor se sentía desfallecer, tomaba de nuevo fuerzas y todo lo superaba.
Odio resignado les dijo a los demás:

– Nada se puede hacer, hemos perdido la batalla. Amor es invencible, lo ha soportado todo, llevamos muchos años insistiendo y no lo hemos logrado.
En un rincón de la sala se oyó una voz firme que con mucha autoridad exclamó:

-Yo me encargaré de Amor.

Nadie reconoció al dueño de esa voz, su rostro pertenecía a un extraño sentimiento.

Confundido, pero con mucha alegría, Odio dijo:

– Ve y hazlo.
Unos días después, Odio volvió a llamar a todos los malos sentimientos para comunicarles, que después de mucho esperar por fin, Amor había desaparecido.
El sentimiento poco conocido se puso de pie, se dirigió a los presentes y les dijo:

Amor, está muerto, tal como deseaban todos ustedes, y sin decir nada más se marchó.

-Espera,-dijo Odio. ¿Cómo has podido vencerle en tan poco tiempo? ¿Acaso no hizo el menor esfuerzo para sobrevivir? ¿Quién eres tú?
El sentimiento mostró por primera vez su horrible rostro y dijo:

-Soy La Rutina.

La rutina es el peor enemigo del amor humano, sin embargo existe un Amor, que ni el tiempo, ni la distancia, ni siquiera un sentimiento de maldad puede vencer: El Amor Incondicional, pues ese amor es eterno, no tiene principio ni fin.

Versión de Ona Daurada del cuento anónimo: ¿Quién mató al amor?

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *