Luminoso y revelador texto de Śrī Aurobindo que con bellísimas palabras nos explica que en el proceso del conocimiento de nuestro yo espiritual, avanzamos en tres pasos que nos conducen a la auto-realización y al verdadero conocimiento.
El primer paso es el descubrimiento del elemento divino dentro de nosotros, el Alma; el segundo, la toma de conciencia de la Unidad y el tercero conocer el Ser Divino que es a la vez nuestro supremo Yo trascendente.
Primer paso
En el conocimiento espiritual del yo están los tres pasos de su auto-realización que son, al mismo tiempo, tres partes del conocimiento único.
El primero es el descubrimiento del alma, no del alma externa del pensamiento, la emoción y el deseo, sino la secreta entidad psíquica, el divino elemento dentro de nosotros. Cuando resulta dominante sobre nuestra naturaleza, cuando somos conscientemente el alma y cuando la mente, la vida y el cuerpo toman su verdadero lugar como sus instrumentos, tomamos conciencia de una guía interior que conoce la verdad, el bien, el verdadero deleite y belleza de la existencia, controla el corazón y el intelecto mediante su ley luminosa y conduce nuestra vida y ser hacia la integridad espiritual. Incluso dentro de las oscuras obras de la Ignorancia tenemos un testigo que discierne, una luz viva que ilumina, una voluntad que rechaza descarriarse y separa la verdad de la mente de su error, la íntima respuesta del corazón de sus vibraciones ante un erróneo llamado y una errónea exigencia, el verdadero ardor y plenitud de desplazamiento de la vida desde la pasión vital y las turbias falsedades de nuestra naturaleza vital y sus oscuras auto-búsquedas. Este es el primer paso de la auto-realización, para entronizar al alma, al divino individuo psíquico en el lugar del ego.
Segundo paso
El paso siguiente es tomar conciencia del yo eterno innato en nosotros y uno con el yo de todas las cosas. Esta auto-realización libera y universaliza; aunque nuestra acción aún proceda en la dinámica de la ignorancia, ya no traba ni lleva por mal camino, porque nuestro ser interior se aposenta bajo la luz del auto-conocimiento.
Tercer paso
El tercer paso es conocer el Ser Divino que es a la vez nuestro supremo Yo trascendente, el Ser Cósmico, fundamento de nuestra universalidad, y la Divinidad interior de la cual nuestro ser psíquico, el verdadero individuo evolutivo en nuestra naturaleza, es una porción, una chispa, una llama que crece dentro del Fuego eterno del cual se encendió y del cual es testigo siempre vivo dentro de nosotros e instrumento consciente de su luz, poder, dicha y belleza. Conscientes del Divino como Maestro de nuestro ser y acción, podemos aprender a convertirnos en canales de su Shakti, la Divina Pujanza, y actuar de acuerdo con sus dictados o su regla de luz y poder dentro de nosotros. Nuestra acción entonces no será dominada por nuestro impulso vital ni gobernada por una norma mental, pues actúa de acuerdo con la verdad permanente aunque plástica de las cosas, —no la que la mente construye, sino la superior, más profunda y más sutil verdad de cada movimiento y circunstancia como la conoce
Del libro “La vida divina II“ de Śrī Aurobindo
Imagen: Georgi Matevosjan
Mamen Lucas
Ona Daurada
Artículos relacionados:
https://onadauradaentrena.com/el-yo-superior-y-la-tarea-vital-de-cada-uno/
https://onadauradaentrena.com/la-busqueda-de-la-felicidad-el-gran-dilema-de-la-humanidad/
https://onadauradaentrena.com/el-alma-la-luz-secreta-dentro-de-nosotros/
