Las emociones cumplen varias funciones. La esencia de todas ellas podría resumirse en siete puntos.
Primero. Las emociones sirven para defendernos de estímulos nocivos (enemigos) o aproximarnos a estímulos placenteros o recompensaste que mantengan nuestra supervivencia. En este sentido, además, las emociones son motivadoras. Es decir, nos mueven a conseguir o evitar lo que es beneficioso o dañino para el individuo y la especie.
Segundo. Las emociones hacen que las respuestas del organismo (conducta) ante acontecimientos sean polivalentes y flexibles. Son reacciones que ayudan a encontrar no una respuesta fija ante un determinado estímulo (como es un reflejo), sino que bajo la reacción general de alerta, el individuo escoge la respuesta más adecuada y útil ante un repertorio posible. Ello se expande, enormemente, con la aparición de los sentimientos (la parte consciente de las emociones). Las emociones y los sentimientos, de esta manera, dotan de más versatilidad a la conducta.
Tercero. Las emociones sirven a las funciones del punto primero y segundo, “alertando” al individuo como un todo único ante el estímulo específico. Tal reacción emocional incluye activación de múltiples sistemas cerebrales (activación reticular, atencional, mecanismos sensoriales, motores, procesos mentales), endocrinos (activación suprarrenal, medular y cortical y otras hormonas), metabólicos (glucosa y ácidos grasos) y en general activación de muchos de los sistemas y aparatos del organismo.
Cuarto. Las emociones mantienen la curiosidad y con ello el interés por el descubrimiento de lo nuevo (nuevos alimentos, ocultación de enemigos, etc…). De esta manera, ensanchan el marco de seguridad para la supervivencia del individuo.
Quinto. Las emociones sirven como lenguaje para comunicarse unos individuos con otros. Es una comunicación rápida y efectiva. En el ser humano el lenguaje emocional es también un lenguaje básico tanto en los miembros de una misma familia como entre los miembros de una sociedad determinada. Ello, además, crea los lazos emocionales.
Sexto. Las emociones sirven para almacenar y evocar memorias de una manera más efectiva. Todo acontecimiento asociado a un episodio emocional, permite un mayor y mejor almacenamiento y evocación de lo sucedido.
Séptimo. Las emociones y los sentimientos pueden desempeñar un papel importante en el proceso de razonamiento y en la toma de decisiones, especialmente aquellas relacionadas con la persona y su entorno social más importante. Este séptimo punto nos invita a pensar que en el hombre, las emociones siguen siendo unos de los constituyentes o pilares básicos sobre los que descansan todas las demás funciones del cerebro, el racionamiento mismo, resulta, como señala Damasio, de la actividad concertada entre la corteza cerebral y la parte más antigua del cerebro: la que genera las emociones (Damasio, 1999).
En el ser humano las emociones se tornan conscientes.
El ser humano “sabe” de sus reacciones emocionales al aflorar éstas a su conciencia.
Esta reacción consciente de una determinada reacción emocional son los sentimientos.
Fuente: Francisco Mora
Imagen: Sandra Bierman
Núria Batlle
Ona Daurada
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