Un 93% de la comunicación es administrado por el inconsciente, que se expresa mediante mensajes de agrado o de rechazo. En cada acto comunicativo, sin darnos cuenta, enviamos continuamente al exterior estos mensajes. ¿Sabes cuáles son los gestos que transmiten un mensaje de agrado y aquellos que son interpretados como mensajes de rechazo?
Mensajes de agrado
Constituyen mensajes de agrado los siguientes gestos:
- Beso a uno mismo. El sujeto frunce ligeramente los labios imitando inconscientemente un beso que no va dirigido a nadie en particular. Es un acto que expresa agrado hacia el tema o el sujeto con el que se dialoga.
- Presión de la lengua en el interior de la mejilla. Generalmente precede a otro acto de agrado que es acariciar los labios sutilmente con la lengua. Con este gesto mostramos que estamos alcanzando un alto potencial de empatía con nuestro interlocutor.
- Apoyar la lengua sobre los labios. Representa la máxima señal de agrado respecto a nuestro interlocutor o el tema tratado por este.
- Mordisquearse los labios. Con esta señal de implicación emotiva, el sujeto invita inconscientemente al interlocutor a profundizar en el tema tratado.
- Succión del dedo o un objeto. Este gesto denota agrado en relación con el interlocutor o la temática tratada.
- Acariciarse el cabello. Indica un agrado extremo (con connotación afectiva) en relación con el interlocutor o el tema del que se habla.
- Desplazar el busto o el cuerpo hacia delante. Indica la existencia de un interés por el tema tratado.
- Desplazar ocasionalmente objetos hacia nosotros. Coger objetos y acercarlos hacia nosotros refleja un intento de hacer propios los conceptos de asunto tratado.
- Tocar amistosamente al interlocutor. Se ha alcanzado un potencial de empatía tan alto que el sujeto, inconscientemente, tiene la necesidad de establecer un contacto físico con su interlocutor.
- Abrir los brazos o las piernas. Si este gesto se da después de que los brazos o las piernas estuvieran cruzados, indica, de un modo evidente, apertura hacia el interlocutor y los temas tratados.
Si nuestro interlocutor realiza estos gestos de aceptación muy frecuentemente, es evidente que expresa agrado hacia nosotros.
En cambio, si el sujeto realiza estos gestos sólo como acompañamiento a determinadas frases, es posible que las señales positivas se limiten a ese tema en concreto.
Mensajes de rechazo
Otros gestos, contrariamente, son interpretados como mensajes de rechazo
- Tocarse la nariz. El sujeto rechaza el argumento o la frase enunciados.
- También en este caso el sujeto rechaza el argumento o la frase enunciados.
- Mover el cuerpo hacia atrás. Simbólicamente, indica un alejamiento del tema o del interlocutor.
- Desplazar ocasionalmente objetos lejos de nosotros. Señala un alejamiento de los temas tratados. Sus variantes son limpiar un polvo inexistente de una superficie y quitar pelos imaginarios de la ropa.
- Cruzar piernas y brazos. Representa un bloqueo relativo al tema tratado por el interlocutor. Cuando el sujeto asume esta posición se activa un mecanismo de rechazo en relación con su entorno y, en ese momento en particular, preferiría estar solo. En lo referente a las piernas cruzadas, estas indican cerrazón sólo si quien tenemos cerca o enfrente corrige su postura encarando la parte externa de su muslo, como si impusiera una barrera simbólica entre él y nosotros.
Otros signos que evidencian una acumulación negativa de tensión son dañarse las manos, los cabellos o las uñas y tamborilear con los dedos.
Fuente: Stefano Di Benedetto
Imagen: Anastasia Kosyanova
Núria Batlle
Ona Daurada
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